*Español abajo*

Stop the criminal repression of the Duque government!

By REVOLUTIONARY SOCIALIST NETWORK

In response to the tax overhaul bill, labor federations called for a day of protest on April 28, which turned out hundreds of thousands of people to the streets and quickly became an indefinite and militant mass mobilization of workers, students, the unemployed, peasants, and large layers of the Colombian middle class. The Duque government responded with an all-out campaign of state terror and repression that, as of May 6, has resulted in 37 deaths, 234 injured, 934 arbitrary detentions, 341 violent attacks on peaceful protests, 26 victims of intentional eye injuries, and at least 11 victims of sexual violence. After Duque ordered the militarization of Cali, Bogotá, and other cities, members of the Colombian army and the Mobile Anti Riot Squad of the national police (ESMAD) have been documented entering working class neighborhoods to persecute, torture, and shoot live ammunition at unarmed civilians. 

Contrary to Duque’s claims that the regressive tax overhaul is necessary to fix the country’s fiscal crisis, 22% of the national budget goes toward the country’s staggering debt, a third of which is illegitimate foreign debt owed to multilateral institutions controlled by rich countries, like the World Bank and the IMF. Roughly 11% of the 2021 national budget is earmarked to pay only interests on public debt. Moreover, while the Duque regime tries to further immiserate the working people of Colombia, the military budget continues to grow and multinational mining corporations, large national companies, and large landowners pay marginal tax rates—a structural problem that was aggravated by Duque’s regressive tax reforms of 2018 and 2019. 

The imperialist government of the United States and US capital in general are directly implicated in the suffering of the Colombian people through the criminal war on drugs; US influence over multilateral institutions that are choking the country with debt while promoting neoliberal austerity; the “dumping” of heavily-subsidized agricultural and industrial goods that displace local farmers and jobs through the US-Colombia Free Trade Agreement; the extortive contracts of corporations like Pfizer that hold patents for desperately needed vaccines; and the funding and training of Colombian military and police forces, which have historically been involved in major human rights abuses and are brutally repressing protesters today. In fact, for its 2021 budget, the US has appropriated $461.4 million for aid to Colombia, primarily for “counter-narcotics” and “counter-terrorism” efforts. 

Despite the extreme level of state repression and the temporary withdrawal of the tax reform bill (protestors know that the government is simply repackaging and rebranding the tax overhaul), the Colombian working class remains in the streets. In a massive, dignified display of militancy, the  people of Colombia are challenging the neoliberal order and showing workers around the world that our power to change society lies in our self-organization and mobilization.

The Revolutionary Socialist Network and the allied organizations below stand in solidarity with the struggle of the Colombian people and demand the following: 

• An immediate end to the Duque government’s criminal campaign of state terror and repression 
• Immediate dismantling of the Mobile Anti Riot Squad (ESMAD) of the national police
• Immediate termination of all military and security aid from the United States to the government of Colombia and the closure of all U.S. military bases
• Cancelation of Colombia’s foreign debt with the United States and multilateral institutions 
• The immediate waiving of all patents on Covid 19 vaccines and medications to relieve the vaccine and medical supply shortages in Colombia and across the Global South. 
• Permanent withdrawal of the reactionary tax overhaul and all other measures (pension reform, healthcare reform, etc.) that seek to put the weight of the economic crisis on Colombian workers. Make corporations and the rich pay for the crisis!  

The RSN includes: La Voz/Workers’ Voice, Central Ohio Revolutionary Socialists, Boston Revolutionary Socialists, Denver Communists, Seattle Revolutionary Socialists, Speak Out Now, and Socialist Resurgence.

¡Viva la lucha de la clase trabajadora Colombiana! Alto a la represión criminal del gobierno Duque

Durante el pico más alto de la pandemia, el gobierno de Iván Duque presentó una reforma tributaria que propuso subir el impuesto al valor agregado (IVA) para bienes básicos y servicios públicos, incluyendo huevos, café, y leche, mantener el abultado presupuesto militar y rebajar los impuestos a la renta de corporaciones y empresas. El rechazo a esta reforma  es uno de los aspectos de una larga lista de reclamos populares, los cuales  incluyen el  creciente desempleo (cuatro millones de desempleados, casi el 10% de la población), 42% de la población nacional bajo la línea de pobreza, el aumento de la informalidad laboral (más de la mitad de la fuerza laboral),  la deficiente estrategia gubernamental para afrontar la pandemia Covid 19 que ya deja 72.000 muertes por Covid 19 y una escasa oferta de vacunas. De igual forma, los y las manifestantes los une un rechazo generalizado contra la ola de violencia paramilitar que ha cobrado la vida de cientos de líderes sociales durante los últimos cinco años (aproximadamente 1,000 líderes asesinados desde 2016)

En respuesta a la reforma tributaria, las centrales sindicales y diversas  organizaciones sociales convocaron a una jornada de paro nacional el 28 de Abril. Ese día,  cientos de miles de Colombianos inundaron las calles de varias ciudades y rápidamente transformaron la movilización de un día en una  protesta masiva e indefinida de trabajadores, estudiantes, desempleados, campesinos y amplios sectores  de la clase media. El gobierno de Duque respondió con una campaña de violencia estatal y represión  que, para el 6 de Mayo, había dejado un saldo de   37 muertes, 234 heridos, 934 detenciones arbitrarias, 341 ataques a protestas pacificas, 26 victimas de ataques oculares, y al menos 11 victimas de violencia sexual. Luego de que Duque ordenara la militarización de Cali, Bogotá y otras ciudades, organizaciones sociales han documentado  diferentes casos de violencia ejercidos por miembros del ejército Colombiano, de la Policía Nacional y del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD). En particular, se registraron casos de integrantes de la fuerza pública entrando a barrios populares,persiguiendo, torturando y disparando a civiles desarmados.

Contrario a las afirmaciones de Duque acerca de  la reforma tributaria como un paso necesario para resolver la crisis fiscal del país, el 22% del presupuesto nacional se va a pagar la deuda pública, un tercio de la cual es deuda externa ilegítima que se le debe a organismos multilaterales, controlados por países ricos, como el Banco mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Aproximadamente el 11% del presupuesto nacional para el 2021 se va exclusivamente en el pago de intereses sobre la deuda pública. Mientras el régimen de Duque intenta aumentar la miseria del pueblo trabajador, continúa aumentando el presupuesto militar y conservando las exenciones tributarias a multinacionales mineras, grandes empresas nacionales, y  terratenientes —un problema estructural que fue agravado por las reformas tributarias de Duque en 2018 y 2019.           

El gobierno imperialista de Estados Unidos y el capital norteamericano está directamente involucrado con el sufrimiento del pueblo Colombiano. En particular, por medio de la injusta guerra contra las drogas y  la influencia de EEUU sobre organismos multilaterales que ahogan el país exigiendo el  pago de una deuda mientras promueven políticas neoliberales de austeridad. De igual forma, Estados Unidos impulsa el “dumping” de bienes agrícolas e industriales que destruye empleos y desplaza a agricultores locales bajo el Tratado de Libre Comercio entre Colombia y EEUU; los contratos con corporaciones como Pfizer que mantienen patentes para vacunas esenciales mientras miles mueren de Covid; y el financiamiento y entrenamiento del ejército Colombiano y la policía nacional. Estas últimas, son fuerzas con un largo historial de violaciones de derechos humanos, que actualmente están reprimiendo de la forma más brutal a los y las manifestantes. De hecho, en el presupuesto del 2021, Estados Unidos autorizó $461.4 millones de dólares en “ayuda” para Colombia, principalmente para programas de “antinarcóticos” y “antiterrorismo.”

A pesar de la represión extrema y del retiro temporal de la reforma tributaria (los manifestantes saben que el gobierno simplemente la está reconfigurando), la clase trabajadora Colombiana sigue en las calles. En una muestra masiva de dignidad y compromiso, el pueblo Colombiano está desafiando el orden neoliberal y demostrandole a los y las trabajadoras del mundo que nuestro poder para cambiar la sociedad yace en nuestra autoorganización y movilización.

La Red Socialista Revolucionaria de Estados Unidos y las organizaciones abajo firmantes expresamos nuestra solidaridad con la lucha del pueblo Colombiano y exigimos lo siguiente: 

• Cese inmediato de las acciones de represión y terror estatal desatadas por el gobierno Duque
• Desmonte inmediato del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) de la policía nacional.
• El cese inmediato de toda ayuda militar y de seguridad que el gobierno de los Estados Unidos brinda a Colombia, así como el cierre de todas las bases militares de EEUU en Colombia.
• La liberación  inmediata de todas las patentes de vacunas y medicamentos para tratar el  Covid 19, de tal forma que se alivie la baja oferta y el alto costo de estos recursos vitales para  Colombia y el resto del Sur Global
• Retiro permanente de las propuestas de reforma tributaria y de cualquier medida (reforma a la salud, reforma a las pensiones, etc.) que intente cargar el peso de la crisis económica sobre la espalda del pueblo trabajador. ¡Que la crisis la paguen los ricos y las multinacionales!  

La RSN incluye: La Voz / Workers ‘Voice, Socialistas Revolucionarios de Ohio Central, Socialistas Revolucionarios de Boston, Comunistas de Denver, Socialistas Revolucionarios de Seattle, Speak Out Now y Socialist Resurgence